Sin cabeza

Cómo pollo sin cabeza, dando pasos sin sentido.
Y en la mitad del camino, como siempre cabeza abajo, en el suelo, abandonado te encontré, querido zapato.
Ningún príncipe ni rey atribulado vendrá a buscarte, para así darte un destino fantástico.
Yo te recogí al paso, y te guarde en mi bolsillo, minúsculo zapato.
Sólo para inventar un pequeño cuento, una historia sin pasado.
Se que te perderé en mitad de mi universo atestado. Pero te recordaré en este pequeño post, que dejaré para siempre aquí colgado.

P.D. Dedicado a esa inmensidad de insignificancias a las que no damos valor

Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s