Este verano he aprendido mucho.
En el minúsculo caos de incorporar a la vida de casa a Raquel, y a la perrita Nina de vuelta a casa, se han sucedido “pequeños” incidentes sin importancia, que han aderezado la vida ordenada y casi lineal que habíamos conseguido.
Así, a pesar de años de método y enseñanza, Nina ahora se sube al sofá a recibir sus cariños y arrumacos, incluso intenta ir a dormir arriba de la cama, como todos (pensará ella), aunque esto último ha sido el límite de lo consentido.
Llegados a este punto, torcí la ceja con gesto serio, la Nina frente a mi con los ojos muy abiertos, los chicos suplicando “dejala, dejala”, pero no cedí.
Son las normas de esta casa.
Como compensación, el animal se volvía taciturno hacia el salón, y cuando todo estaba despejado, de un salto se coloca en el sofá y allí pasa la noche.
A la mañana siguiente, muy temprano, de camino a la cocina, escucho cuatro patas posando sus uñas de un salto en el parquet.
¿Que has hecho Nina?
La perrita paralizada, esperando una reprimenda, sin apartar de mi vista los ojos muy abiertos, mientras le señalo la mancha que ha dejado en el asiento del sofá.
Cuando se lo cuento a Raquel, de un salto, me sorprende con “Habrá sido Gerar” entre risas.
Si Nina no pudo aguantarse y se hizo caca en la terraza… “Habrá sido Gerar”.
Si en un gesto descontrolado, jugando con la pelota, se rompió algo, sin querer … “Habrá sido Gerar “.
Así ha ido pasando el verano, y hemos aprendido que, si te equivocaste con la ropa de lavadora y se destiñó … “Habrá sido Gerar”.
Si las luces se olvidaron encendidas, las puertas abiertas o si llovió, “Habrá sido Gerar”.
¡coño Gerar, que capacidad!
Da igual si fue Nina, Raquel, Andrea, Sito o el aire del mar … “Habrá sido Gerar”.
Aprendí que “Gerar” es una especie de duende descuidado que va haciendo cosas de las que te pueden reprender.
O simplemente es el dueño de la mala suerte, porque si tienes previsto playa, y sale nublado … “Habrá sido Gerar”.
Así que de un “cuento de bosque gallego” hemos creado un “monstruo” en Andalucía.
Siempre entre risas, con la princesa Raquel.
Una curiosidad: no se si es casualidad, pero el cuñado de Raquel se llama Gerard.
¡Cuanta maldad! No puedo ser tan mal pensado.
El Gerard de carne y hueso es un bendito.
… y colorín colorado,
P.D. “Habrá sido Gerar” es siempre una afirmación. La posibilidad de ¿Habrá sido Gerar? no se contempla: Sencillamente no cabe la dudad. 😂😂