La última vez que fui,
abrazos intensos
tomados despacio.
Besos pausados
seguidos, sin fin.
Caricias suaves,
apenas un roce.
Paciencia infinita
en una noche.
La última vez que fui feliz.
Ahora la cama es más ancha,
Más fría, te extraña.
Ahora, en calma,
mi amiga del alma,
el corazón latiendo
de vida, de ganas.
Estoy permanentemente en babia, donde habito.
¿La razón por la que escribo?
“… yo no estoy loco, y ciertamente no sueño. Pero mañana muero, y hoy querría aliviar mi alma.”
Edgar Allan Poe
Ver todas las entradas de 21siglosofia