Hoy echo de menos la aventura de vivir enamorado. La ilusión desbordada. La locura de existir y estar por otra persona. Por ti. La alegría constante sin razón aparente. La impaciencia de esperar a verte. Los nervios mirándote de frente. El placer de sentirme querido. Los millones de planes que constantemente hacemos. El tiempo parado en interminables caricias. El corazón acelerado mientras te veo llegar. El sueño alterado si te imagino cada noche. La única sonrisa que reconozco en la multitud. La certeza de sentirme coordinado como tu pareja de baile. La cercanía sin barreras, sin límites. Las manos entrelazadas durante el paseo. Te echo muchísimo de menos. Te espero aunque pase mucho tiempo. Extraño este corazón vacío. Es necesidad: ¡Te quiero a ti!
(A mi madre, por su entrega infinita y su amor sin límites.
A mi padre: por que se que a veces ese brillo cuando la mira es amor.)