En un mes de agosto, pasado ya los calores, de madrugada temprano, con olor a flores y roció, de un ser de luz, entre risas, viniste tú.
Nunca nadie antes había concitado tanto amor, tanta dulzura y felicidad a su alrededor. Viniste a unirlo todo a darle sentido. Te podíamos haber llamado Amor.
Has crecido, te has hecho guerrera, sin dejar de ser cariñosa y gentil.
Mi rubia peligrosa, como tú madre no pierdas nunca tu genio, que es la risa.
Siempre con miedo de que te hagas daño, mi niña preciosa, pero me has demostrado que puedo confiar en ti.

#abuelinoencamino
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