El abrazo

Aveces sueño 
con certezas. 
Como esta:

Mi padre 
puso en mi ADN 
un abrazo. 

Lo hizo, como supongo 
que también en él 
lo acuñaron. 

Porque nadie 
abraza como nosotros. 
Permítanme alardearlo. 

El nuestro es un abrazo 
grande, y largo. 
Y suave, y enredado. 

Casi siempre casto, 
aunque a veces 
se nos fue la mano. 

Es un abrazo de amigo 
es un abrazo sentido, 
de hermano.

Ahora que no podemos darlos, 
aparece la importancia 
de este gesto para ambos. 

Tanto el que da, 
como el que recibe, 
se cuelgan encantados. 

Es una pérdida 
horrible, 
no podemos soportarlo. 

Mi padre y yo 
soñamos cada día 
con ese abrazo. 

Por favor. 
Déjame 
dártelo. 
Anuncio publicitario

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s