Dentro de una pecera tengo mi reino. Parece infinito. Inmenso. Y cada vez que salgo a explorarlo una barrera infranqueable me impide hacerlo. Puedo mirarlo trasparente. El horizonte es tremendo, pero no puedo tocarlo. Mi reino se hace pequeño, de pronto ..... Pero no limita esa barrera, el mundo en los ojos alcanza más allá donde solo llegan los sueños.
Estoy permanentemente en babia, donde habito.
¿La razón por la que escribo?
“… yo no estoy loco, y ciertamente no sueño. Pero mañana muero, y hoy querría aliviar mi alma.”
Edgar Allan Poe
Ver todas las entradas de 21siglosofia