Un abrazo vacío
Un beso al aire
Un amor soñado
Un viaje con nadie
Dame una razón
para seguir tranquilo
pasando los días
paseando por el filo
Tiende un enlace
una línea en el cielo
que llegue tu mensaje
y siga tus pasos, amor
Dame sin prisas
Tu canción preferida
el eco precioso
de tu risa
… y seguiré
exprimiendo
lo que me queda
de vida
Categoría: de cuento
De gotas de lluvia

en flickr
Me vacié
Lo di todo
Hasta doler
y ahora no tengo nada
Nos separa
un mar de gotas
de lluvia
Y ya no veo
tu cara
en el charco
El cielo,
llorando,
nos cierra el paso
Y te sueño
cada instante
a ciegas
mientras
acaricio tu espalda
con las yemas de los dedos
Y ahora que estás
Me voy
te vas
Amor
Carta de amor
Dejaré de escribir, dejare de respirar. Empezaré a leer a otros, a mirar. Quiero salir de tu lista de gilipollas, que solo te llaman para follar. Quiero desaparecer, hacerme invisible, dejar de ocupar un sitio en este espacio reducido e imprevisible, donde estalla el llanto y la rabia rompiendo el espejo de magia, donde te mientes si te miras. Hacer sitio en tu vida para que la verdad aparezca llena de la felicidad que mereces y que sin más llama a tu puerta luciendo los colores intensos de tus sueños, de tu ojos, de tu alegría. Y esperaré solo a que me llames cuando eches de menos ese abrazo esos besos, esa lucha de cuerpos entregados ese cariño, esa paz de rozar tu piel con la punta de mis manos, sin prisas, sin descanso, detenido el tiempo, caricia interminable. Los labios, los ojos abiertos, serenos, mirando.
Para mi
Abre para mi el día. Dame tu sonrisa, tú alma entregada. Te devolveré por demás la mía y encontraremos la calma en la brisa.
Mi charco
Todo el sol y el cielo, y el inmenso mar reflejado sin más en mi charco. Que más puedo soñar. Solo que tú no estás a mi lado.
Puedo

Puedo ayudarte a crecer Y para crecer, tendrás que dejarme ir
Diferentes
Definitivamente no somos iguales.
A ti te gusta tomar, fumar y salir hasta la madrugada.
A mi no me gusta tomar, ni fumar y me levanto de madrugada.
Pero, en lo que tú llegas y yo salgo, pasan unos instantes maravillosos que no cambiaría por nada.
- Quisiera que me contaras que hay de Magia en las sombras, en el silencio de la noche, en la luz de las estrellas.
- Te lo cuento todo si tú me dices cómo son los colores, los olores de las flores, y el calor de la arena.
La Luna y el Sol
Amor imaginado
A ese amor de verano, que no llegó al invierno, que solo existió en mi cabeza y me hizo volar tan lejos. A ese amor imaginado, intenso y tierno, dulce y salado, que para mi fue eterno. Te escribo y te anhelo, los besos robados, la caricia de viento. Devuélveme el aliento que dejo en mi pecho prendidos los abrazos, … el silencio, en un beso.

¿Porqué azul?
Porqué si. Porqué no. Porque tú, porque yo. Porque vas donde nadie va. Porque tomas y me abandonas. Porque tengo que esperar sin sentido para hablar. Porque reír es la luna a tus pies en una noche azul azul, azul.
El pozo

Vivo en un pozo, que escalo con esfuerzo. Pero al mínimo descuido, caigo en picado. Siento, a veces, que salgo, que tengo una vida tranquila.
Pero pasa el día y se vuelve todo a alterar. Mi existencia es más bien color sepia. Alguna vez se ilumina y me engaña con colores brillantes.
Luego llega la noche, atenúa y apaga los brillos y desaparecen los colores. Desaparecen los amores, y vuelve la guerra. Perdida sin duda, porque lucho contra mi.
Si gano, pierdo. Y si pierdo, lo perdí todo.
Y así fue.
Al otro lado del río, en el fuerte, vi una luz un día. Imposible de cruzar ese río caudaloso, con la corriente aumentada por las lluvias. Conozco un amigo de brazos de acero, que lo cruzó a nado.
Hoy la noche es oscura, sin luna. Solo me queda soñar.
Si alguna vez lograra cruzar, la luz ya no estaría, se habría apagado.
Una flor encontré en el camino, roja amapola. Y me quede mirándola extasiado, aprendiendo sus curvas y hasta su sombra. Sabiendo que no podía llevarla conmigo, el mayor gesto de amor era renunciar, dejarla atrás en su sitio del camino.
Y la memoria me juega malas pasadas. A veces la veo grande, hermosa, más que el sol. Y otras lloró desconsolado cuando me doy cuenta que me olvidé de ella, al otro lado.
Dos y dos no siempre son cuatro. Según cree mi hijo, podré convencerte y probarlo, … y puedo.
El día mas bonito empieza bien temprano. Da igual si amanece lluvia o despejado. Ayer me perdí en el laberinto que en mi cabeza había trazado. Enciéndeme la luz, o mándame una risa, que siga su rastro, y así poder volver pronto a tu lado, amor.
