Y- Hoy fui a ver a Cesar. Por primera vez. – le digo a Hilario.
Estuvo callado y atento. Provocando con su silencio.Me ayudó un poquito.
Estamos midiendo los terrenos.
H- Creo que no te dice todo lo que ve, todo lo que piensa. Es un profesional. – Contesta seguro Hilario.
Yannis – Yo tampoco le dije todo. Soy introvertido. Pero por un momento, me emocioné, y me relajé. –
Hilario – No creo que aguantes mucho más la presión. –
Y – Si me ayudó a verbalizar lo que pienso. Opina que es difícil salir de la encrucijada, donde adaptarse al presente pase por ser como soy; y también pasa por dar por acabado este nudo. Y a la vez, lo contradictorio es, ya finalizado, ¿que hacer sin nada más que lo pasado? ¿Terminar? –
H – Quizás tu mejor opción sea terminar con todo. Terminar con esto. – opina Hilario.
Y – Lo plantea como una lucha de mi yo contra mí mismo. Si gano, es un “por el momento”, hasta la próxima vez que se me ocurra. –
H – Sin embargo, si pierdes, es un instante, y para siempre. Un instante decisivo. Y ya está.-
Y – Pero no puedo dejar de pensar en lo que dejo atrás. Me importa demasiado. Nunca he sido cobarde. Y esto puede parecerlo, aún siendo la decisión más valiente. –
H – Esta duda te está matando, amigo. Puedes elegir el momento adecuado. Minimizar daños… –
Y – Desgraciadamente, Hilario, puede que tengas razón, y de todas las que tengo, es la mejor opción. –
H – ¿Y dejarlo terminado? Tranquilo. Todo en su momento. –
Y – A Cesar lo que es de Cesar. Me dijo que era bueno compartirlo. El me ha ayudado, y dentro de un mes volvemos a ver que ha pasado. –